
La base para la carne loncheada suelen ser los trozos de filete, que ya no son aptos para filetes debido a su tamaño. Aquí se puede usar cerdo, ternera y ternera. Las aves de corral como el pollo o el pavo también se utilizan para la carne en rodajas.
Pero: la carne en rodajas suele tener solo medio centímetro de grosor, por lo que existe un mayor riesgo de que se cocine demasiado.
Si desea que permanezca tierno y rosado por dentro, como estas rebanadas de lomo de res, haga lo siguiente:
- 10 minutos antes de dorar, espolvorea los trozos de carne con una pequeña pizca de sal y revuelve para combinar. En esta baja concentración, la sal liga los jugos de la carne y no extrae ningún líquido.
- Caliente una sartén con aceite resistente al calor (mantequilla clarificada, aceite de maní, etc.) al máximo.
- Coloque los trozos de carne uno al lado del otro (!) en la sartén caliente y dórelos.
- Voltee una vez después de unos 30 segundos y retírelo de la sartén.
- Ahora se pueden agregar otros ingredientes a la sartén usada. En este ejemplo se trata de cabezas de hongos en cuartos. Estos se chamuscan por todos lados sin sal, luego se desglasan con vino o caldo y se rellenan con crema.
- Platos como la carne en lonchas dejan mucho espacio a la imaginación de los ingredientes. En este caso, también podrían procesarse los restos de floretes de brócoli escaldados. Simplemente agregue a la salsa casi terminada y caliente.
- Para finalizar se añade a la salsa sazonada la carne con el poco jugo de carne que se ha escapado.
- No recalentar, servir de inmediato.